¡41 añazos, ya! Las singular kids dicen que son un montón y, la verdad, es que lo son.
Ha sido un cumple de esos entrañables, llenito de amor, mucho cariño y rodeada de la gente que quiero. No faltaron las sorpresas.
Nos juntamos unos cuantos amigos y familia para celebrarlo, me apetecía reunirles a todos en una mesa en tonos turquesa y ámbar. Para darle un toque Pascua y primaveral decoramos cada plato con estos huevos de pascua con flores a conjunto con las servilletas, las dos cosas son de HEMA, una de mis tiendas de cabecera.
Para finalizar, el sorpresón de las singular kids: ¡pedazo de tarta de chocolate decorada con flores! La hicieron con sus propias manitas, dando las indicaciones de los ingredientes y medidas y solo precisaron ayuda para batir y hornear. ¡Todo un mérito! Lo mejor es que consiguieron ocultarme el proceso y el producto hasta el final y me dieron una sorpresa increíble. ¡Se me saltaban las lágrimas!
Como este cumple ha sido en fin de semana nos lo pasamos entero celebrando: tarde de chicas con merienda y compras, cena en familia con un postre para morirse, la comoda que os acabo de contar y cómo no, un desayuno bueno, bueno y saludable. No faltó de nada.
¿Se puede cumplir mejor 41 años? Gracias a todos. Abrazos singulares.